El universo vinícola es amplio y complejo. Factores como la cepa de uva, el clima, los métodos de producción y un sinfín de variables dan lugar a distintos tipos de vinos con propiedades muy diferentes entre sí. Notas dulces o ácidas, sabores intensos o suaves, mucha o poca espuma. Todos estos matices pueden ayudar a distinguir la bebida, pero incluso los más experimentados suelen llegar a confundirse en ocasiones.
En Mas Salagros somos amantes del buen vino y disfrutamos enseñando sobre su elaboración e historia. Por eso te ofrecemos la experiencia de un paseo entre viñas DO Alella, para que conozcas cómo es el proceso, y lo culminamos con una degustación en la que conocerás varios tipos de vinos que conquistarán tu paladar.
No hay una sola forma de clasificar el vino, pues para cada una de sus características tenemos varios tipos. Veamos algunas de las principales maneras de clasificar los vinos y las diferentes variables.
Se trata del principal rasgo distintivo y divide al vino en:
Juega un papel importante en la intensidad de los sabores y aromas del vino, y los más envejecidos son los que suelen tener mayor prestigio o guardarse para ocasiones especiales. Se diferencian en cuatro categorías diferentes:
Depende de los gramos de azúcar residual en el vino y su diferencia respecto a los de ácido tartárico por cada litro de bebida.
Este es el responsable de la efervescencia del vino, y bajo ese criterio se dividen en:
En este caso nos referimos al tipo de uva a partir de la cual se elabora el vino. Existen infinidad de variedades, pero algunas de las que seguro que te suenan son:
Hablar de tipos de vino no se limita al color o el tiempo de envejecimiento, sino que influyen muchos factores que pueden crear decenas de categorías. Por esta razón no es difícil que cualquier persona encuentre ese vino predilecto que le acompañe en sus mejores momentos.
En Mas Salagros lo sabemos, y por eso nos esmeramos en ofrecerte una gran variedad de opciones ecológicas que seguro que disfrutarás. Puedes elegir el menú degustación con maridaje, hacer una cata de mano de un sumiller o simplemente dejarte llevar por tu instinto y escoger una botella para saborear en nuestros restaurantes o en tu habitación. Sea cual sea tu elección, te estaremos esperando para que disfrutes del placer de un buen vino en un espacio con filosofía slow.