La Fuente de la Budellera (o Font de la Budellera) es uno de esos lugares que pocas personas conocen, pero que resultan encantadores. Por eso, si has planeado una escapada a Barcelona muy pronto, te animamos a que incluyas este bello destino entre los que ya has planificado visitar. Descubre la historia de la Fuente de la Budellera y qué es lo que encontrarás en ella. Para empezar, ¡elige unas deportivas cómodas!
La historia de la Fuente de la Budellera es muy interesante, ya que, a lo largo de los años, se pensaba que su agua era una de las más puras y milagrosas. De hecho, se creía que era un agua buena para los intestinos. Por eso, eran muchas las personas que se acercaban al actual parque de Collserola a rellenar sus garrafas de agua para poder mantenerse hidratadas con una de las mejores aguas de toda Barcelona. ¡Qué leyenda!
La Fuente de la Budellera fue una creación de Claude Nicholas Forestier y data del siglo XX. Fue restaurada una vez, añadiendo unas mesas de piedra y escaleras que convierten a este lugar en uno propicio para el descanso y merendar.
El motivo por el que al principio te decíamos que debías elegir unas deportivas cómodas era porque hay que caminar para llegar a esta fuente milagrosa. Y es que hay unos 3,6 kilómetros en los que recorrerás caminos donde la naturaleza se expande por todas partes, generando una sensación de calma y tranquilidad.
Cuando entres en el parque que lleva el nombre de esta fuente, verás la figura de un peregrino que te dará la bienvenida. En cuanto des unos pasos, te darás cuenta de que hay tres caminos muy bien señalizados entre los que tendrás que elegir. Uno de ellos, el de la izquierda, te llevará hasta la Fuente de la Budellera.
Tras un agradable paseo, vas a subir unas escaleras muy bonitas de piedra. Al llegar, si vas con niños y en familia, podrás descansar, disfrutar de este maravilloso lugar, dejar que los más jóvenes disfruten un poco y reponer fuerzas antes de regresar. Cuando vuelvas, fíjate en las vistas que te ofrece el paseo hacia el parque de Collserola y el Tibidabo.
Si quieres seguir en contacto con la naturaleza después de tu visita a la Fuente de la Budellera, puedes reservar ya una estancia en Mas Salagros. En nuestro EcoResort te esperan actividades relajantes, que te conectan con la naturaleza y que te evadirán de todas tus preocupaciones.
Prueba a elegir nuestra Garden Suite, si quieres tener un jardín privado y tener una ubicación privilegiada frente a la piscina, u opta por nuestra habitación superior comunicada, destinada a las visitas familiares. Aquí también tendrás un jardín solo para ti y tus hijos, para que improvises un pícnic o ver las estrellas cuando caiga la noche.
En Mas Salagros solo utilizamos productos de proximidad para crear platos ecológicos y deliciosos. Nuestro restaurante Cibus es estupendo para los niños, ya que nuestros arroces y brasas les suelen encantar.
Si lo que buscas es una selección de tapas y platillos, el Gastro Wine Bar es un lugar ideal para ello. Todos los productos utilizados son de temporada y, además, podrás escoger uno de nuestros vinos ecológicos. Su sabor te sorprenderá.
Para relajar los músculos, después de la visita a la Fuente de la Budellera, una buena idea es acudir a AIRE Ancient Baths Vallromanes. Un espacio wellness donde la relajación estará asegurada y en el que podrás sumergirte en varias aguas a diferentes temperaturas. Además, selecciona un masaje si lo necesitas de 30 minutos o hasta una hora.
Si has venido en familia, o con las amigas, a nuestro EcoResort, no puedes irte sin hacer algunas de las excursiones que tenemos preparadas. ¡Toma nota!
Ahora que sabes lo que te ofrece Mas Salagros, no dudes en hacer tu reserva antes de visitar la Fuente de la Budellera. Una oportunidad para descubrir un lugar único y para que puedas descansar y relajarte con quienes más quieres.
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